La vicepresidenta asegura que cualquier avance que beneficie a las víctimas vendrá desde la unidad de instituciones, profesionales y tejido social. Alerta, asimismo, sobre los discursos políticos fascistas que son «grandes zancadas hacia atrás» en la igualdad y lucha contra la violencia machista
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La vicepresidenta del Gobierno de Cantabria, Eva Díaz Tezanos, ha alertado sobre las graves consecuencias que puede tener, para la igualdad y la lucha contra la violencia de género, los discursos políticos fascistas que se están produciendo y que «van encontrando hueco en las instituciones». En su opinión, «una parte importante de la ciudadanía aún no ha sopesado correctamente» lo que estos discursos suponen.
Díaz Tezanos ha hecho estas declaraciones durante la inauguración del I Congreso de Violencia hacia las Mujeres organizado por el Ejecutivo regional y que reúne hasta mañana a cerca de 300 asistentes, sobre todo profesionales que tienen contacto directo con las víctimas.
«Hoy corren vientos muy preocupantes en nuestro país, discursos políticos fascistas impensables, algunos de viejos conocidos que han arremetido desde la justicia contra las víctimas, y ya lo hacen sin esconderse anunciando públicamente y en sus programas electorales la derogación de la ley integral contra la violencia de género, el aborto cubierto por la sanidad pública y las listas paritarias en los partidos», ha asegurado Díaz Tezanos para quien todo eso son «recortes en derechos que son zancadas hacia atrás en todo lo que hemos conseguido en las últimas décadas».
Frente a esta amenaza, la vicepresidenta ha apostado por la unidad de instituciones, profesionales y tejido social para avanzar «ante una encrucijada, sin duda importante, que tenemos como sociedad».
«Cualquier nuevo avance que beneficie a las victimas vendrá desde la unidad, vendrá desde la coordinación, la colaboración, el consenso y la cooperación de todos los agentes implicados», ha señalado la vicepresidenta que ha puesto en valor cómo esa unidad y ese consenso han conseguido situar a la violencia machista en una «cuestión de Estado» y a España en un país referencia en la lucha contra la violencia machista.
La vicepresidenta ha asegurado que el feminismo institucional y social consiguió trasladar la violencia de género desde un problema privado a un problema de toda la sociedad, y el consenso político y social ha conseguido que haya pasado a figurar en las agendas políticas y a ser hoy una cuestión de estado, como lo evidencia el Pacto de Estado recientemente aprobado «uniendo fuerzas públicas y alcanzando consensos como hace 13 años para aprobar la ley integral contra la violencia de género».
Díaz Tezanos además ha asegurado el compromiso real del Gobierno de Cantabria «que no va a bajar la guardia» y ha precisado que en la primavera de 2019 el Ejecutivo regional va a abrir dos nuevos centros integrales de atención a las mujeres, uno en Torrelavega y otro en Laredo, reforzando el Centro Integral de Santander que además contará con tres nuevas profesionales, dos psicólogas y una trabajadora social, y va a abrir una segunda casa de acogida para mujeres víctimas y sus hijos e hijas.
También se ha referido a la próxima ley de Igualdad efectiva entre mujeres y hombres de Cantabria que entrará en vigor el próximo año y a los nuevos protocolos que se han puesto en marcha durante esta legislatura para avanzar en la coordinación entre instituciones y dar una atención de mayor calidad a las víctimas, además del importante esfuerzo en formación de profesionales que están en contacto directo con las víctimas de la violencia machista.
«Es evidente que la coordinación entre los ámbitos social, sanitario, judicial y de las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado garantizará una mayor eficacia a nuestros esfuerzos», ha asegurado Díaz Tezanos para quien esa coordinación de todos los ámbitos da una mayor seguridad a la víctima y más confianza en el sistema, algo clave a la hora de denunciar.
Además, la vicepresidenta ha puesto el acento en el avance que se ha dado en la atención a los niños y niñas, los hijos e hijas de víctimas, y que Nuria Varela ha cuantificado en 222 desde 2013 en España. «Son víctimas directas ya que tienen su propio estatuto de victimas» ha explicado la vicepresidenta que ha asegurado que se está formando a profesionales para mejorar la atención a menores.
Sobre los jóvenes y adolescentes, la vicepresidenta ha llamado la atención de la alarmante tolerancia hacia relaciones toxicas y violentas y ha explicado que se están llevando a cabo actuaciones en el ámbito educativo, en sensibilización y concienciación social, en la prevención y atención a todas las víctimas, pero ¿ha reconocido- «queda mucho camino por recorrer».
Cantabria, la Comunidad donde más crecieron las denuncias en 2017
Díaz Tezanos, durante su intervención, ha revelado que en 2017 Cantabria fue la Comunidad Autónoma donde más crecieron las denuncias por violencia de género, 1.908 denuncias, con una media de 5,2 cada día y un crecimiento respecto a 2016 del 26,6%.
«Un dato que nos impulsa a esforzarnos por generar cada vez mayor confianza en el sistema judicial», ha asegurado la vicepresidenta que se ha mostrado convencida de que a ello contribuirá la entrada en vigor de las últimas reformas, sobre todo, lo relativo a la garantía de asistencia letrada en el momento previo a la denuncia.
Ha explicado que en 2017 el Centro de Información y Atención Integral del Gobierno de Cantabria atendió a 315 mujeres nuevas que acudieron por primera vez, y solicitando información y atención sobre maltrato se respondieron 5.795 llamadas. La sección de atención psicológica del centro programó 2.561 citas y realizó 1.806 sesiones, y por abuso y acoso sexual se atendieron a 15 mujeres a un menor.
Además, ha precisado que el pasado año en el centro de emergencia ingresaron 35 personas, entre mujeres víctimas y sus hijos e hijas, en el centro de acogida permanecieron 36 víctimas, y los pisos tutelados acogieron 6 personas.
Un problema que afecta al núcleo central de la democracia
La vicepresidenta ha asegurado que la desigualdad entre hombres y mujeres es un «problema que afecta al núcleo esencial de los valores que orientan nuestro modelo de convivencia. «Una sociedad democrática, un estado de derecho que se sostiene sobre el principio de libertad, de justicia y de igualdad de derechos no puede permitirse bajo ningún concepto como media, sesenta mujeres asesinadas cada año», ha señalado.
«Uno de los retos más importantes que tiene la democracia en pleno siglo XXI es acabar con la desigualdad y la inferior calidad de derechos de más de la mitad de la población, que somos las mujeres», ha defendido la vicepresidenta que ha puesto el acento en el perjuicio que eso supone para toda la sociedad «que se ve afectada por el despilfarro del talento y el potencial de las mujeres».
